Pero, para empezar, el significado de estos dos términos unidos: lo patrimonial y lo digital, no tiene todavía un consenso en su definición.
El 16 de enero de 2009 en la Carta sobre la Preservación del Patrimonio Digital, UNESCO ofreció la siguiente definición de este concepto:
El Patrimonio Digital está conformado por recursos únicos de conocimiento y expresión humana. Abarca los recursos culturales, educativos, científicos y administrativos, así como la información técnica, legal, médica y de otro tipo creada digitalmente o convertida a formato digital a partir de recursos analógicos existentes. Donde los recursos “nacen digitales”, no hay otro formato que el objeto digital.
La verdad es que esta definición es, a mi juicio, tremendamente amplia y difícil de abarcar en toda su dimensión. Con la modestia de alguien que acaba de abrir su mente para aprender sobre el concepto de Patrimonio Digital, en principio mi objetivo estará con la mira puesta más en el contenido del Patrimonio Cultural y sus vínculos con las diferentes tecnologías digitales, lo que UNESCO llama Digital Cultural Heritage. Eso sí, siempre abierto a reflexionar y ampliar el conocimiento sobre el concepto de Patrimonio Digital y sus derivadas.
Mi postura inicial es la de que el Patrimonio Digital es un apoyo para la preservación del Patrimonio Cultural. El gemelo digital o el BIM de un edificio, un espacio o un monumento, nos sirve para preservarlo en caso de que por cualquier circunstancia ese bien se dañase o desapareciese. Por desgracia, en estos días fatídicos de la guerra de Ucrania vamos a perder mucho patrimonio cultural y será la digitalización la que nos ayude, esperemos que muy pronto, a devolverlo a su estado original o al menos a conservarlo de forma digital y recordar cómo fue, aunque sea de forma virtual.
Con la digitalización también preservamos los bienes para la posteridad. Las huellas del tiempo se podrán medir , evaluar y suprimir, manteniendo íntegro el objeto a conservar. Pero también la digitalización es magia y nos puede traer al presente aquellos hitos del patrimonio que desaparecieron en el pasado y de los que a lo mejor se conservan planos, dibujos o fotografías que permitan su reconstrucción digital.